Durante el debate entre candidatos a la presidencia del gobierno, el señor Sánchez mintió al afirmar que Torrelodones había retirado de sus fiestas el punto violeta de prevención contra la violencia de género. Ya se ha cursado invitación al señor Sánchez para acudir a las fiestas en honor a la Virgen del Carmen con el fin de que pueda comprobar por sí mismo la falacia expresada en prime time. No puede ser que desde La Moncloa, acostumbrados a cargar contra la Comunidad Autónoma de Madrid, ahora ataquen a municipios. Con mentiras.
En Torrelodones los temas relativos a la violencia machista se gestionan desde una Mancomunidad de Servicios Sociales integrada por los ayuntamientos de Torrelodones, Hoyo de Manzanares, Alpedrete y Moralzarzal. La presidencia en funciones la ostenta servidora, quien jamás se ha planteado tal cuestión. Entonces. ¿de dónde sale el bulo?
El pasado 27 de junio la portavoz de VOX en el ayuntamiento y concejal de Servicios Sociales, Mayores y Familias afirmó en un vídeo, inmediatamente rectificado porque sencillamente no tiene las competencias para hacer lo que afirmó, que iba a retirar dichos puntos. Apenas media hora después, desde el PP emitimos un comunicado explicando la cuestión. Se dijo que el asunto depende de la Mancomunidad, por un lado, y, por otro, que en ningún caso estábamos de acuerdo con lo expresado por VOX, luego explicaré por qué.
«No me parecen mal los puntos violeta. Sé que mi postura no gustará a ningún extremo ideológico»
Personalmente desmentí en mis redes sociales informaciones publicadas en diversos medios de comunicación que sostenían el bulo. También lo hizo el PP mediante un comunicado remitido a los medios. Así pues, la cuestión debería de haber quedado clara. Pero parece que se ha convertido en deporte de unos cuantos en las últimas semanas mentir sobre Torrelodones.
Y es que hay a quien le interesa enredar en Torrelodones, porque no acepta el resultado electoral del pasado 28 de mayo. Los perdedores. La marca blanca del sanchismo. Algunos tertulianos siguieron, pese a los desmentidos, estos días dando pábulo a la mentira. Posiblemente a eso se agarraron los asesores del presidente Sánchez, cuando le prepararon las fichas que se utilizan en los debates. Pésimos asesores. Las informaciones hay que contrastarlas y, en este caso, era sencillísimo hacerlo.
Ahora que Sánchez juega a periodista, debería de hacerlo con rigor. ¡Feliz Navidad! En este estado de cosas se llegó al debate, en el que el mismísimo presidente del gobierno se hizo eco de lo que hoy los cursis llaman fake news y que no son más que la trola de toda la vida.
En Torrelodones el punto violeta estará en funcionamiento desde la medianoche hasta las 4 de la madrugada todos los días de fiesta
Pero quería aprovechar la cuestión para explicar por qué no me parecen mal los puntos violeta. Sé perfectamente que mi postura no gustará a ningún extremo ideológico, porque no entro en la lucha de sexos colectivista en la que algunos están enfrascados.
En Torrelodones el punto violeta estará en funcionamiento desde la medianoche hasta las 4 de la madrugada todos los días de fiesta. Y es que, en estos días, fechas para el asueto, la diversión y la alegría, también se produce una concentración de personas superior a lo normal. Y, lamentablemente, la experiencia demuestra que donde hay aglomeraciones la probabilidad de aumento de las infracciones penales, incluyendo las agresiones sexuales o el acoso, se disparan.
Sin entrar en exageraciones, como hace la ministra Irene Montero que parece más un meme que una ministra, el punto violeta puede cumplir dos funciones: disuasorio y apoyo. Disuasorio porque los “malos” tienen conocimiento de que existe el punto, por cierto, situado muy cerca de la policía local y protección civil. De apoyo porque cuando se es víctima de uno de estos repugnantes delitos, es importante ser asistido inmediatamente por personas especializadas en la cuestión. En este sentido, el punto violeta será atendido por personal especializado designado por la Mancomunidad de Servicios Sociales y la Comunidad de Madrid.
Saben qué hacer. Saben cómo reaccionar. Como ven, no se trata de ideología. Se trata de apoyo a las personas. ¿Quién puede estar en contra de esto? A mí no me cabe en la cabeza. Como no me cabe en la cabeza que un presidente del gobierno pueda mentir tan alegremente.
