Pablo Mayoral, el hombre que hizo política cuando había que jugarse la vida por hacer política. Pablo Mayoral, el hombre que lo dio todo por la democracia en tiempos de dictadura. Pablo Mayoral, el hombre que vio nacer la libertad en este país a través de los barrotes de su celda. Pablo Mayoral, el hombre que no pudo vivir las primeras elecciones en España porque estaba condenado a muerte.
Pablo Mayoral, el hombre que representa a miles de hombres y mujeres que si no hubieran existido, sin cuya lucha, sin cuyo arrojo, sin cuya valentía posiblemente, quién sabe, no sabríamos en España lo que son las elecciones. Pablo Mayoral, el hombre sin el que no existiría el 23-J electoral.
Pablo Mayoral, el hombre que arranca el podcast 23-Jodidas Noche Electorales con una frase que hace que nos demos cuenta que todas las frases de este podcast no tienen sentido si no entendemos que sus palabras son la base de lo que somos: «La primera noche electoral yo no pude vivirlas porque estaba en la cárcel porque fui uno de los procesados de guerra que se hicieron en el verano del 75, en el que se pidieron 13 penas de muerte; una de ellas, la mía, Se condenaron a 11 personas a muerte y se ejecutaron a cinco. Asesinaron a 5 jóvenes el 27 de septiembre de 1975 en lo que fueron los últimos fusilamientos de Franco».
Pablo Mayoral, el hombre que con su discurso debería callar a todos los neofascistas que no vivieron aquella barbarie. Pablo Mayoral, el hombre cuyo testimonio emocionará a los que vivieron lo que él o saben de lo que habla porque se lo han escuchado a sus mayores. Pablo Mayoral, el hombre que hoy comparte su vida con Patricia López, directora de Crónica Libre, en su podcast político 23-Jodidas Noches Electorales.
Pablo Mayoral, no olviden este nombre. Pablo Mayoral, pasen y escuchen.
