Alberto González Amador, pareja de Isabel Díaz Ayuso, ha sido denunciado por la Fiscalía por dos delitos de fraude fiscal por un total de 350.951,41 euros y un delito de falsedad documental por presentar facturas falsas. La investigación fue iniciada por la Agencia Tributaria al detectar un incremento del volumen de negocios de la empresa de la que el novio de Ayuso es administrador único, en los ejercicios 2020 y 2021, es decir, en lo peor de la pandemia. Según el documento al que ha tenido acceso Crónica Libre, Alberto González Amador, defraudó 155.000 euros en el año del confinamiento. Y lo hizo, entre otros, por la deducción de una factura por un importe de 620.000 euros emitida por una empresa mexicana «que no realizó ningún servicio o trabajo a la entidad», denuncia la Fiscalía. El fraude en 2021 ascendió hasta los 195.951,41. Ese ejercicio, según el ministerio público, la empresa del novio de Ayuso «facturó algunos de sus servicios a su principal cliente, Quirón Salud» a través de otra empresa de la que es socio único y administrador Alberto González Amador. «Dicha empresa carece de medios materiales para prestar esos servicios». Quirón Salud es la adjudicataria de la mayoría de los hospitales públicos de gestión privada de la Comunidad de Madrid.
Fue el pasado 22 de enero cuando la Agencia Tributaria remitió un informe a la Fiscalía sobre la empresa Maxwell Cremona Ingeniería y Procesos Sociedad Para El Fomento del Medioambiente S.L, cuyo administrador único es Alberto González Amador, actual pareja de Isabel Díaz Ayuso, por indicios de delitos contra la Hacienda Pública por el Impuesto de Sociedades de 2020 y 2021. Al día siguiente, la Fiscalía abría las Diligencias de Investigación Penal.
Según el documento al que ha tenido acceso Crónica Libre, la pareja de Isabel Díaz Ayuso defraudó a Hacienda 350.951,41 euros en 2020 y 2021 gracias a una trama de facturas falsas y sociedades pantalla. Así consta en una denuncia de la Fiscalía Provincial de Madrid tras recibir un informe de la Agencia Tributaria con las conclusiones de una investigación iniciada en 2022 al detectar un incremento del volumen de negocios en los años más duros de la pandemia.
Hacienda se alertó por el incremento de volumen de negocios en lo peor de la pandemia
Fue el 12 de mayo de 2022, según la información de este digital, cuando la Agencia Tributaria inició sus actuaciones de comprobación del Impuesto Sobre Sociedades de los ejercicios 2020 y 2021 de la empresa de Alberto González Amador. «Se detectó que dicha sociedad, con la finalidad de eludir su tributación, ante el incremento del volumen de negocios que había experimentado en esos ejercicios, llevó a cabo determinadas conductas, con la única finalidad de reducir dicha tributación, deduciéndose indebidamente gastos en virtud de facturas que no se corresponden con servicios realmente prestados», dice el informe que Hacienda trasladó a la Fiscalía.
Entre las facturas que, según la Agencia Tributaria, no se corresponden con servicios realmente prestados destaca una por la Alberto González Amador se dedujo por un importe de 620.000 euros emitida por una sociedad mejicana y de la que el documento de Fiscalía destaca que «no realizó ningún servicio o trabajo a la entidad Maxwell Cremona Ingeniería Y Procesos Sociedad Para El Fomento Del Medioambiente, SL» propiedad de la pareja sentimental de la presidenta de la Comunidad de Madrid. El siguiente ejercicio, en 2021, la empresa de Alberto González Amador se dedujo indebidamente otra factura por un importe de 922.585,63 euros emitida por una sociedad costarricense, propiedad de la misma persona que la empresa mexicana.
En la denuncia consta que la empresa de la pareja de Ayuso «carece de medios materiales para prestar esos servicios»
Entre la retahíla de facturas presentadas por la empresa de González Amador, la Fiscalía destaca el hecho de haber utilizado otra empresa para su propio beneficio. Destaca el Ministerio Fiscal que en el ejercicio 2021, la empresa Maxwell Cremona -de la pareja de Ayuso- facturó algunos de sus servicios a su principal cliente Quirón Salud, haciéndolo a través de la empresa Masterman & Whitaker SL, de la que también es socio único y administrador Alberto González Amador.
«Dicha empresa carece de medios materiales para prestar esos servicios, los cuales se prestaban con medios de Maxwell Cremona, buscando Alberto González con esa conducta un ahorro fiscal al trasladar parte la actividad a una sociedad vinculada con él, con la finalidad de generar bases imponibles negativas en Masterman & Whitaker SL a compensar en el futuro con los beneficios que aquella pudiera obtener», explica la denuncia de la Fiscalía.
La empresa Quirón Salud es la adjudicataria de la mayoría de los hospitales públicos de gestión privada de la Comunidad de Madrid, como son la Fundación Jiménez Díaz (en Madrid capital), Rey Juan Carlos (Móstoles), Infanta Elena (Valdemoro) o el General de Villalba (Collado Villalba).
Fue Díaz Ayuso quien les habría presentado en 2020, en 2021 se formalizó la relación y viven juntos desde 2023
Según la prensa de crónica social, Isabel Díaz Ayuso y Alberto González Amador se habrían conocido a finales de 2020. Al parecer, fue el hermano de la presidenta, Tomás Díaz Ayuso, quien los presentó y así se lo habrían hecho saber a su entorno. La relación con Alberto González, al que la prensa le presentó como técnico sanitario, se hizo oficial en 2021. El pasado año, la pareja dio un paso más y se compró un piso en el elitista, céntrico y castizo barrio de Chamberí de 180 metros cuadrados, garaje, trastero, vigilancia las 24 horas y un precio que rondaría el millón de euros.
