Gabriel Rufián, portavoz de ERC, durante una rueda de prensa en el Congreso de los Diputados, a 14 de marzo de 2023, en Madrid (España). Alberto Ortega / Europa Press

La reforma de la «ley mordaza» cae a pelotazos de goma

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Ni uno, ni dos, ni tres, sino cuatro han sido los disparos fallidos para derogar la Ley de Seguridad Ciudadana aprobada por el Gobierno de Mariano Rajoy en el año 2015: el uso de material antidisturbios, las conocidas como devoluciones en caliente, las faltas de respeto y la desobediencia a los agentes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. Estos son los artículos por los que Bildu y ERC han votado en contra del texto que emanó de la ponencia y que este miércoles ha sido sometido a debate y votación en la Comisión de Interior en el Congreso de los Diputados.

El desenlace de esta reforma bien podría titularse «Crónica de una muerte anunciada», pues todo el mundo sabía lo que iba a ocurrir como los protagonistas de la novela del gran García Márquez conocían el fatal destino de Santiago Nasar. Un final tan esperado como indeseado por los grupos políticos que prometieron derogar la ley mordaza. Una oportunidad perdida para acabar con una de las leyes más lesivas con la ciudadanía y una promesa más incumplida por el Gobierno y sus socios.

Antes de que comenzara la Comisión de Interior ya se sabía que la reforma de la «ley mordaza» no iba a llegar a buen puerto. Tanto ERC como Bildu habían anunciado con anterioridad que no apoyarían el texto en los términos en los que se debatía y sin su voto favorable era imposible que la reforma llegara al Pleno del Congreso de los Diputados. Ambas formaciones habían comunicado su decisión a través de una declaración conjunta de los diputados Jon Iñarritu (Bildu) y María Carvalho Dantas (ERC), en la que, además, han dado a conocer las cuatro enmiendas transaccionales que han presentado a última hora para intentar pulir el texto más a su gusto.

Imposibilidad de llegar a un acuerdo

«No ha sido posible, lo hemos intentado y hasta el último minuto hemos pedido que se abstengan, para que se aprobara el dictamen y después seguir negociando, pero no han querido», ha declarado Patxi López, portavoz parlamentario del PSOE. Sobre lo que podía haber sido, y no va a ser, también ha hablado el portavoz socialista, insistiendo en que estaba acordado cambiar «todo lo que hacía que a la Ley de Seguridad Ciudadana se le llamara ley mordaz.

Además, ha recalcado que sobre el tema de las pelotas de goma, uno de los puntos que ha hecho caer la reforma, en la ley de lo que se habla es de sus protocolos de utilización no de su prohibición. En este sentido, y lanzando un dardo a ERC, López ha añadido que «no hay una ley en Cataluña que prohíba las pelotas de goma».

David Serrada, ponente del PSOE durante el proceso de reforma de la ley mordaza, ha indicado que después de más de 50 reuniones de trabajo, el texto que hoy se votaba se ajustaba al compromiso de derogar «los aspectos más lesivos» de la ley. También ha explicado que quedaban retocados los principales puntos en los que había protesta social y que afectaban a «la libertad de expresión» o «al derecho a la manifestación».

Igualmente, ha lamentado que por «táctica partidista» y grupos que han priorizado «sus propios intereses» (por estar las elecciones locales a la vuelta de la esquina), los ciudadanos vayan a continuar sufriendo las consecuencias de una ley que «la mayoría progresista de este país no comparte».

La culpa es de los que hoy votan «no»

«Si esto cae, la responsabilidad va a ser de quien se oponga a que salga adelante la reforma», ha sentenciado Enrique Santiago, portavoz adjunto de Unidas Podemos, instantes antes de su entrada a la reunión de la Comisión de Interior. El que ha sido ponente de su grupo parlamentario durante la reforma de la ley mordaza ha querido destacar todo el trabajo realizado para llegar a un texto que acababa con los aspectos más lesivos de la ley, lamentando que «ningún demócrata, ni nadie de izquierdas» puede entender que no se derogue la «ley mordaza».

También ha incidido en que hay que seguir trabajando para «recuperar» derechos y libertades y ha denunciado las presiones de la derecha, la ultraderecha y los sindicatos policiales para seguir «cinco años más con la ley de Rajoy».

El portavoz en el Congreso de los Diputados del PNV, Aitor Esteban, ha mostrado su «decepción» porque la reforma no haya salido adelante. Como impulsores del texto que hoy ha sido rechazado, Esteban ha destacado el trabajo realizado para conseguir equilibrar el principio de seguridad y los derechos. En este sentido, ha señalado que «se han hecho 36 cambios relevantes con respecto a la normativa anterior».

Sobre el fracaso de la reforma de la ley mordaza, el portavoz del PNV ha recalcado que no ha sido posible por el «todo o nada» de ERC y Bildu, añadiendo que los aplausos del PP en el debate también son responsabilidad de estas dos formaciones. «Hay muchas cosas que explicar por parte de esos grupos y no es de recibo que no hayamos podido modificar esta ley», ha concluido.

Bildu y ERC explican su no a la reforma

Al milagro, que no se ha producido, se aferraba Iñarritu a su entrada a la Comisión. El diputado abertzale ha explicado el sentido del voto de su formación: «No nos hacemos ni cómplices ni responsables de una nueva ley que permita sancionar a un agente a su libre albedrío, no elimine las pelotas de goma y mantenga las devoluciones en caliente». Además, ha señalado el día de hoy como «un día triste» por no llegar a un acuerdo después de más de medio centenar de reuniones.

En esta misma línea, ha calificado la reforma como «light», porque mantiene los aspectos más lesivos de la ley mordaza, y ha insistido en que esta propuesta «se queda lejos del compromiso de derogación» que asumieron los partidos de la oposición cuando fue aprobada en 2015. También se ha pronunciado la portavoz parlamentaria de Bildu, Mertxe Aizpurúa, que ha lamentado que, teniendo la mayoría parlamentaria para hacerlo, no se acabe con el «espíritu represor» de la ley mordaza y no se apruebe una «ley progresista que garantice la seguridad ciudadana».

Por su parte, Dantas Carvalho ha remarcado que ERC no va a legitimar «ni amputaciones de ojos, ni asesinatos a manifestantes con balas de goma», dejando claro que una de las líneas rojas para ellos a la hora de negociar la reforma de la ley mordaza ha sido el uso del material antidisturbios por parte de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado. También ha acusado a PSOE y Unidas Podemos de «maquillar» la «ley mordaza» en lugar de derogarla, como se comprometieron, porque sigue manteniendo las multas por desobediencia y falta de respeto.

Asimismo, ha calificado la propuesta fallida como «una ley de seguridad policial» ya que sigue permitiendo que la policía «pisotee impunemente los derechos de toda la ciudadanía con multas arbitrarias y abusiva. Para concluir ha manifestado que «si el Gobierno quiere mantener esos abusos policiales, no lo harán con los votos de ERC». Gabriel Rufián, portavoz de los republicanos en el Congreso, ha tildado de «decepción» el no derogar una ley que permite «apalear» en la frontera y «sacarle un ojo a la gente».

¿Qué opinan los policías?

Mientras en el interior del Congreso se votaba el dictamen de la Comisión de Interior para la reforma de la «ley mordaza», en la Plaza de las Cortes, frente a la escalinata y los leones, protestaban alrededor de 50 personas convocadas por el sindicato policial Jupol, reunión en la que también participaban miembros de la plataforma Jusapol.

«Entendemos que venimos de un escenario de violencia agravada en la calle donde las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado progresivamente vienen perdiendo el principio de autoridad que ostentan. Y entendíamos que esta reforma de la Ley de Seguridad Ciudadana iba a suponer esa pérdida del principio de autoridad cuando las estadísticas públicas que maneja el Ministerio del Interior en la variación de los índices de criminalidad está en claro aumento. Entendemos que lo que tienen que hacer es reforzar con personal, con más medios y con más herramientas, como esta Ley de Seguridad Ciudadana que es una herramienta de trabajo para nosotros», ha dicho Anxo Rama, representante de Jupol.

También ha dado su punto de vista a Crónica Libre, Mónica García, secretaria general del Sindicato Unificado de Policía. «La sensatez ha imperado en esta Comisión de Interior. Si esta ley se hubiera aprobado estaríamos hablando de un retroceso para ejercer la labor policial ya que afectaría especialmente a la ciudadanía, dando más privilegios a los que alteran el orden público que a los que velan por la seguridad de los ciudadanos. Por lo menos tenemos algo que celebrar en estos tiempos tan difíciles para las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad», ha sentenciado la líder sindical.

Jose Luis Espinosa

Periodista, madrileño y madridista. Antes de hacer Periodismo hice dos meses de Publicidad. Me gusta más contar las cosas que venderlas. En COPE me enamoré de la radio; en ABC descubrí mi pasión: escribir.