El Tribunal Constitucional (TC) ha decidido a última hora de este lunes paralizar la tramitación en el Senado de las dos enmiendas que le afectan directamente y que iban a ser sometidas a debate durante esta semana en la Cámara Alta.
Ante el fallo de los magistrados, después de una deliberación resuelta por un voto a favor de la postura del sector conservador y en la que han tomado parte los cuatro integrantes del tribunal cuyo mandato está caducado, el Congreso de los Diputados y el Senado han decido personarse en el procedimiento abierto en el TC sobre el recurso de amparo presentado por el Partido Popular.
Dado lo insólito de la decisión, ya que es la primera vez que el poder Judicial frena la tramitación de una ley antes de su aprobación con la consiguiente injerencia que esto supone en la actividad del Legislativo, tanto Meritxell Batet, presidenta del Congreso, como Ander Gil, presidente del Senado, han anunciando que aceptan la decisión pero mostrando su preocupación por lo acontecido.
Así, Batet ha expresado su inquietud porque esta decisión del TC “posibilita que la interrupción de la potestad legislativa esté al alcance de un solo diputado con la interposición de un recurso de amparo”; mientras que Gil ha querido destacar que “en cuarenta y cuatro años de democracia, jamás se había despojado a las Cortes Generales de su facultad de legislar” y que “su inviolabilidad queda de este modo seriamente comprometida”.
A pesar del bloqueo para tramitar estas dos enmiendas el Senado continuará con la tramitación del resto de la proposición de ley aprobada el jueves pasado en el Congreso.
Sánchez apela a la serenidad
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha comparecido en una declaración institucional desde el palacio de la Moncloa para “trasladar un mensaje de serenidad a la ciudadanía” y anunciar que: “El Gobierno, como no puede ser de otra manera y aunque no compartamos la decisión, acatamos la resolución adoptada ayer por la actual mayoría conservadora del Tribunal Constitucional”. Sánchez también ha querido destacar que la decisión del TC de frenar las dos enmiendas relativas al Poder Judicial es un hecho “grave” que “paraliza la acción de las Cortes Generales” y que, además, lo hace en un asunto que afecta a la renovación del propio TC “conforme a lo que establece la Carta Magna”.
En este sentido, ha explicado que se trata de un hecho “sin precedentes en la historia democrática de nuestro país” e “inédito en el contexto europeo”, ya que “por primera vez, se impide a los representantes legítimos, democráticamente elegidos por los españoles con su voto, que realicen su función de representación y legislación en el Parlamento”.
En alusión al bloqueo por parte del Partido Popular para renovar el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Sánchez ha acusado al principal partido de la oposición de decidir “incumplir el mandato constitucional” desde que perdieron las elecciones en 2019 para “mantener una composición anterior y más favorable para su orientación”. El líder del Ejecutivo ha sentenciado que “distintas direcciones del PP han arrojado distintas excusas que reflejan el propósito del PP de mantener, por medios espurios, un poder que los ciudadanos no han validado en las urnas”.
Asimismo, ha señalado que “nuestro sistema democrático dispone de mecanismos para superar una situación de esta naturaleza” y que “el Gobierno adoptará las medidas necesarias, conforme a la ley, para poner fin al injustificable bloqueo del Poder Judicial y del Tribunal Constitucional y, en consecuencia, para que sea respetada la voluntad popular expresada en las elecciones de 2019”.
Feijóo plantea elecciones generales
El líder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo, ha instado a Pedro Sánchez a que “renuncie a modificar el Código Penal a toda prisa”. Además, ha pedido al líder del Ejecutivo que acometan estas reformas alcanzando “acuerdos de Estado” ya que, de no hacerlo, la otra salida posible “sería la celebración de elecciones generales”.
Haciendo referencia a cómo se han alcanzado los acuerdos para modificar los delitos de sedición y malversación, el líder de los populares ha asegurado que “el Gobierno quiere avanzar en una agenda política marcada por fuerzas contrarias al interés del pueblo y que no está validada en las urnas porque los electores lo desconocían”. Como la reforma de estos delitos ha llegado vía negociación con el independentismo catalán, Feijóo ha destacado que “no hay sentido de Estado en que el Gobierno someta las grandes decisiones al capricho de los partidos que quieren irse de nuestro país”.
En relación a la decisión del TC de paralizar la tramitación de las dos enmiendas introducidas en la reforma del Código Penal, y que afectan al proceso de renovación de sus miembros, Feijóo ha sentenciado que “sería fundamental que el Gobierno, en aquello que legítimamente quiera proponer, primero lo someta a los órganos de consulta vinculantes o no preceptivos como el Consejo de Estado, el CGPJ o el Consejo Fiscal”.
Además, ha añadido que querer renovar el CGPJ, y profundizar en la “independencia de los jueces y la despolitización de la Justicia”, es incompatible con “la ruptura y la anulación de las sentencias del Tribunal Supremo en los delitos de sedición y malversación”. Como respuesta a las críticas vertidas por parte del Gobierno y sus socios al fallo adoptado por el TC, el líder de la oposición les ha afeado que califiquen a los jueces de fachas con toga y que cuestionen sus procedimientos, para terminar apostillando que: “Basta ya de impugnar el sistema que ha traído a nuestro país los cuarenta años de mayores libertades”.
Reformar la Ley Orgánica del Tribunal Constitucional
Iñigo Errejón, líder de Más-País, ha confirmado que su formación ya ha registrado una proposición de ley para reformar la Ley Orgánica del Tribunal Constitucional. En declaraciones a los medios en el Congreso de los Diputados, ha explicado que ya la tenían preparada por si “se confirmaban los peores augurios” y se “cometía este atropello democrático” por parte de un TC que “se salta las normas” y que “tiene una mayoría caducada e ilegítima”. Después del fallo del tribunal de garantías, Errejón ha aseverado que este “ha impedido que los senadores y diputados hagamos nuestro trabajo, que podamos discutir y votar, nos ha intentado amordazar”.
Como respuesta a la postura de los conservadores en lo referente a la renovación del TC, ha asegurado que “el Partido Popular ha decidido secuestrar algunos órganos para mandar siempre” añadiendo que el PP “gobierna con las urnas cuando estas les dan la razón”. Sin embargo, según su opinión, cuando las urnas no les dan la razón, hacen política con “tribunales caducados que convierte casi en una especie de tercera Cámara”, para ejercer el poder que no tienen en el Congreso de los Diputados porque “el PP cuando tiene minoría no lo acepta, y secuestra las instituciones”.
Por su parte, Inés Arrimadas, presidenta de Ciudadanos, ha vuelto a sacar a la palestra “el plan Sánchez”, las tres palabras más utilizadas por su predecesor en el cargo, el exdiputado Albert Rivera. Un plan que en palabras de la líder liberal consiste en “controlar el TC para que le permita llevar a cabo las barbaridades que le piden sus socios separatistas”. También ha mostrado su “satisfacción” por la resolución adoptada por el TC declarando que demuestra que “el Gobierno no puede hacer lo que quiera” y que “en nuestro país no hay poderes absolutos como es normal en una democracia”.
En alusión a las declaraciones de Meritxell Batet y Ander Gil, Arrimadas ha expresado que ha sido “un numerito” ver a la presidenta del Congreso y al presidente del Senado “defender al Gobierno”, cuando “su obligación es defender a los diputados y senadores”, para sentenciar que: “Es exactamente lo que hacía Forcadell”.