Después de comparecer en el Senado para explicar las medidas adoptadas para hacer frente a la guerra de Ucrania, el presidente del Gobierno ha acudido este miércoles al Congreso de los Diputados para contestar a las preguntas de los grupos parlamentarios en la sesión de control al Gobierno. Una sesión en la que Sánchez ha sido «regañado» por Gamarra, cuestionado por la situación de los trenes en Cataluña por Gabriel Rufián e interrogado por Miriam Nogueras sobre cómo va a pagar el Gobierno sus promesas.
Pedro Sánchez, que salió vencedor del cara a cara con Feijóo en el Senado de este martes, definitivamente se ha puesto el traje de campaña. No solo para los comicios autonómicos y municipales del 28-M, sino también para las generales que tendrán lugar el próximo diciembre. Así, como si se hubiera transformado en el protagonista de la película Atrapado en el tiempo, repite la misma fórmula cada vez que se enfrenta a un debate político: sacar pecho de las conquistas logradas por el Gobierno durante la pandemia y la guerra de Ucrania, criticar la respuesta neoliberal que se dio a la crisis financiera de 2008 y reconocer que todavía queda mucho por hacer.
Quién cesa a sus ministros Sr. Sánchez
En la sesión de control al Gobierno de este miércoles, la primera en debatir con Sánchez ha sido Cuca Gamarra, portavoz del Partido Popular. En sus intervenciones, la diputada de los conservadores ha regañado al presidente por no cesar a quiénes a su juicio debería haber destituido y le ha preguntado que “¿quién es el responsable de cesar a sus ministros?”
Desde Irene Montero, ministra de Igualdad, por la que ha preguntado a Sánchez si sigue confiando en ella “después de mil rebajas de condenas y de su voto en contra de la reforma de la ley del solo sí es sí”; pasando por Fernando Grande-Marlaska, ministro de Interior, que sigue en su puesto tras haber sido “reprobado” por el Congreso, “condenado” por el Tribunal Constitucional y “censurado” por sus compañeros del Consejo de Ministros; hasta llegar a Yolanda Díaz, vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo, para recordarle a Sánchez que “le llama machista y dice que Marruecos es una dictadura”.
Así, ha preguntado al presidente del Gobierno que “¿de qué tiene miedo?” Si de que le desalojen de la Moncloa por cesar a alguien, o si su temor está relacionado con el contenido de su teléfono robado a través del programa Pegasus. En este sentido, ha destacado que Sánchez no tuvo problemas en cesar a la ministra de Exteriores, González-Laya, porque “se lo pidió Marruecos”.
Después ha ironizado utilizando la ley de vivienda. “Ya se hacen apuestas sobre cuántas viviendas anunciará hoy Pedro Sánchez”, ha dicho Gamarra antes de de afear al presidente del Gobierno que lleva cinco años gobernando y ha construido “cero viviendas”. También ha señalado que Sánchez no cesa a nadie porque su única política de vivienda es “la de seguir residiendo en la Moncloa”. La portavoz de los populares ha terminado su intervención insistiendo en que serán los españoles quienes propicien el cambio “de un Gobierno en descomposición” en las elecciones. “Entre todos derogaremos el sanchismo”.
Cumplan con la Constitución
Sánchez ha respondido con bastante sorna en un primer momento. Ante el aplauso y el jaleo de su bancada, el presidente del Gobierno ha espetado a Gamarra que la respuesta sobre quién cesa a los ministros esta en el artículo 100 de la Constitución. “Esa misma Constitución cuyo artículo 122 ustedes llevan incumpliendo 1602 días”, haciendo referencia al bloqueo del PP para la renovación del Consejo General del Poder Judicial.
El grueso de su intervención, Sánchez lo ha dedicado otra vez a mencionar los logros del Gobierno en materia económica durante la legislatura, y especialmente en los periodos de la pandemia y ahora con la crisis por la guerra de Ucrania. Sobre la evolución de la economía ha insistido en que “nada tiene que ver con milagros”, haciendo referencia a Rodrigo Rato. “Ya sabemos lo que pasó con los milagros económicos cuando estaban ustedes en el Gobierno: acabaron todos en la cárcel”, ha remarcado Sánchez, para concluir que el PP “no puede soportar” que este Gobierno “gestiona muchísimo mejor que ustedes la economía”.
Sobre la ley de vivienda a cuestionado a su interlocutora que qué es lo que tanto le molesta al PP del texto. “Que en esa ley de vivienda subamos del 30% al 40% el suelo protegido para poder construir vivienda pública, o que prohibamos que esas viviendas protegidas se vendan a fondos buitres, que es lo que hacían cuando estaban ustedes en el Gobierno”. Para terminar, Sánchez a emplazado a Gamarra a que hagan cumplir la futura ley en las comunidades autónomas donde gobierna el PP, y a que cumplan con la legislación europea y “acaben con el atropello en el Parque Nacional de Doñana”.
Los trenes en Cataluña
Gabriel Rufián, portavoz de ERC, ha preguntado a Sánchez sobre su gestión en Cataluña, a lo que el presidente ha contestado en lineas generales que Cataluña está mejor ahora en 2023 que en 2018 cuando llegó a la Moncloa. El diputado independentista, tras la intervención en clave electoralista del presidente ante Gamarra, ha comenzado su intercambio con Sánchez diciéndole que “ha puesto el piloto automático y anda más perdido que Feijóo en un debate”.
La principal cuestión que ha querido tratar Rufián ha sido el funcionamiento de los Rodalies (los trenes de Cercanías), que es lo único que gestiona el Gobierno en exclusiva en Cataluña. Rufián ha comenzado enumerando una serie de deficiencias en el servicio de los Rodalies, como son que el año pasado se aglutinaran en total “350.000 minutos” de espera, que hubieran “473 incidencias” y que “80.000 personas quedaron tiradas porque no pasó ni un solo tren durante todo un día”.
Así, ha insistido en que esta situación hace que mucha gente lo pase mal cada día, y por ello ha preguntado a Sánchez qué proyecto tiene para mejorar el servicio, porque a su juicio “los trenes funcionan igual que en 2011 o en 2012”. Para finalizar, ha anunciado que ERC presentará la reprobación de la ministra de Transportes, Raquel Sánchez.
Sánchez ha utilizado su replica a Rufián para lanzar un dardo más hacia la bancada del PP, insistiendo en que la situación en Cataluña y en general es mejor que la que heredó cuando llegó al Gobierno en 2018. La respuesta neoliberal a la crisis finaciera, la desafección política fruto de los casos de corrupción y la crisis de convivencia en Cataluña han sido los tres aspectos que ha destacado como herencia del PP.
Sobre los Rodalies, Sánchez ha pasado de puntillas, destacando la gratuidad del transporte público en Cataluña y otras CC.AA gracias “al compromiso del Gobierno”, y recordando que según le ha trasladado la ministra de Transportes “solamente el 6% de ellos tiene retrasos de más de tres minutos”. Ante la incredulidad de Rufián desde su escaño por las palabras de Sánchez, este le ha pedido que no utilice la desinformación como hacen otras formaciones políticas, espetando al portavoz de ERC que “son datos del ministerio; porque usted no los cree”.
La vivienda pública en España
La portavoz de Junts, Míriam Nogueras, ha utilizado su intervención para cuestionar a Sánchez que cómo va a pagar sus promesas estando en número rojos, ya que el déficit del Estado asciende a “exactamente 74.000 millones de euros”. También ha criticado los anuncios sobre vivienda pública de Sánchez durante el último mes.
“Hace dos semanas vino a vendernos -porque no ceden, nos venden- 50.000 pisos de la SAREB, la semana pasada anunció 43.000 más y ayer 20.000 más; parece el milagro de los panes y los pisos”.
A continuación ha dado un baño de realidad al presidente sobre los datos de vivienda pública: “España tiene 47 millones de habitantes y un parque público de 450.000 viviendas sociales; los Países Bajos, por ejemplo, son 17 millones de habitantes y tienen más de 2 millones de viviendas sociales, ¿cuántas viviendas públicas ha construido usted durante su mandato?”
El líder del Ejecutivo ha contestado que, como dijo ayer en el Senado, “esta no es la España que queremos los progresistas”. A pesar de los buenos datos de la economía, como la evolución del PIB, la afiliación a la Seguridad Social o los indices de desigualdad, Sánchez ha reconocido que “queda mucho por hacer”. En este sentido, ha vuelto a insistir en que todavía hay muchas reformas necesarias para “reconstruir lo dañado durante la respuesta neoliberal a la crisis financiera”.
En relación a la situación de la vivienda pública, Sánchez ha compartido el diagnóstico de Nogueras señalando que es inaceptable que en España solo haya un 3% de vivienda pública en comparación con el 9% de la media europea o el 20% de las economías nórdicas. Sin embargo, si ha querido destacar que cuando llegó al Gobierno solo había 450 millones dedicados a vivienda en los presupuestos y que ahora hay 3.500 millones.
“Vamos a aprobar la primera ley de vivienda, y el Gobierno a través de la SAREB, del ICO y del compromiso del ministerio de Defensa, vamos a impulsar la mayor obra pública de vivienda protegida, sobre todo para los jóvenes”.